PÁJAROS AMARILLOS LOS

PÁJAROS AMARILLOS LOS

POWERS KEVIN

18,00 €
IVA incluido
Editorial:
SEXTOPISO
Año de edición:
2012
Materia
Narrativa extranjera o traducida
ISBN:
978-84-15601-10-4
Páginas:
192
Encuadernación:
Rústica
Colección:
NARRATIVA SEXTO PISO

Disponibilidad:

  • LIBRERÍAS PICASSO - ALMERÍADisponible en 1 semana
  • LIBRERÍAS PICASSO - GRANADADisponible en 1 semana
18,00 €
IVA incluido
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A sus veintiún años, el soldado Bartle es enviado a combatir en la guerra de Irak, junto con un compañero de dieciocho años, el soldado Murphy, de quien se hace cargo desde el comienzo. Narrada a través de los ojos de Bartle, Los pájaros amarillos cuenta de primera mano el sinsentido de una guerra librada bajo un sol feroz, combatiendo a un enemigo ubicuo, en ciudades convertidas en fantasmas. Entre muchas otras cosas, la guerra le roba para siempre a Bartle su presente, y vivirá atrapado por los recuerdos que lo atormentan, intentando comprender acciones que a la distancia ya no le parecen ni suyas ni de nadie más.
Los pájaros amarillos ha sido comparada a grandes novelas de guerra como las escritas por Hemingway, Norman Mailer y Tim O´Brien. Powers combina el conocimiento adquirido en carne propia con una prosa elegante y poética, que transportan al lector al campo de batalla, y viva la guerra de Irak como algo más real que la crónica periodística más cruenta que jamás haya leído.

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el 25.03.2013 Por Recomendación de Librerías Picasso

Fragmento seleccionado:

«Cuando dormíamos, la guerra frotaba sus mil costillas contra el suelo, rezando; cuando forzábamos el paso hasta la extenuación, los ojos se le ponían en blanco y se quedaban abiertos en la oscuridad y, cuando comíamos, aceleraba sin más alimento que su propia penuria. Hacía el amor, daba a luz y se extendía por el fuego».


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Por Recomendación de Librerías Picasso el 25/03/2013

Fragmento seleccionado:

«Cuando dormíamos, la guerra frotaba sus mil costillas contra el suelo, rezando; cuando forzábamos el paso hasta la extenuación, los ojos se le ponían en blanco y se quedaban abiertos en la oscuridad y, cuando comíamos, aceleraba sin más alimento que su propia penuria. Hacía el amor, daba a luz y se extendía por el fuego».


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