UTOPIA DEL OPRIMIDO LA

I. La utopía, el constitucionalismo y la literaturaLa utopíaLas funciones
NegativaPolíticaConstitutivaTransformadora Tipologías
Abstractas y realesArcaicas, futuristas y cotidianasNegativas y positivasIndividuales y colectivasInstitucionales y popularesConservadoras y transformadorasOtras clasificacionesLa utopía como método
El diagnóstico y la crítica: qué y por quéLas alternativas: hacia dóndeEl camino a la transformación: cómo y
para quéElementos para una definiciónEl pensamiento crítico y el constitucionalismo del
oprimido
El pensamiento críticoEl silenciamiento y la cegueraLa voz, la visión y la emergencia de los
ausentesLo popular y oprimido en el derecho
constitucional La literatura y la utopía
La realidad y la representaciónLa acción simbólicaLa utopía en la literatura II. Las utopías de la modernidad hegemónicaLas utopías occidentales
IbéricasLiberalesLa utopía del desarrollo y progresoEl comunismo y el socialismo utópicoLa modernidad hegemónica
El racionalismo científicoLa colonialidadEl capitalismoUna mirada al proceso de inserción de
América Latina al capitalismo¿Se puede cumplir la utopía del desarrollo y
progreso?Los problemas irresolubles del capitalismoEl constitucionalismo y los derechos humanos
como utopíaIII. La utopía andinaAproximación históricaLa modernidad barrocaLa pachamama
La dualidad armónicaEl sentipensarLa decolonialidadEl valor de usoLos derechos de la naturalezaEl sumak kawsayLas disputas sobre el sumak kawsayComprensión del mundo desde el sumak kawsayLos principios del sumak kawsayLa relacionalidadLa reciprocidadLa complementariedadLa correspondenciaLa afectividad y la espiritualidadLa ciclicidad y el tiempo para el cuidadoEl comunitarismoDimensiones del sumak kawsayIV. Recapitulando: otro mundo es necesario y
posibleLa utopía de la modernidad hegemónica es
negativa y conservadoraLa pachamama y el sumak kawsay son parte de
una utopía andinaEl camino hacia la utopía andina requiere
soñadores con brújulaLa literatura permite abrir la imaginación y
contribuye a la comprensión de teorías

Las alternativas radican en el imaginario, no en la fantasía. Así lo demuestra Ramiro Ávila Santamaría, doctor en Sociología jurídica y docente universitario, quien ofrece la utopía como herramienta de transformación. A diferencia del deber ser, que sólo corre en un sentido de exigencia, la utopía es ambidiestra: surge del imaginario -la médula humana, de la cultura- para plantear nuevas posibilidades sociales y luego volver a nosotros para cuestionarnos. ¿Pueden la cosmovisión de los pueblos y las luchas sociales abrevar a la política, al derecho, al pensamiento crítico?

El método utópico, como se demuestra en estas páginas, puede aplicarse para describir y explicar la realidad, los fenómenos sociales e incluso para analizar cualquier forma de representación. A través de él se hace posible cuestionar toda utopía -incluida la del capitalismo y sus ideas de progreso o desarrollo- para proponer alternativas posibles en las que todos los órdenes de la vida en sociedad sean incluidos.

Este recorrido no inicia en la teoría aceptada, sino en el pensamiento kichwa, en la Sinfonía inconclusa de Schubert y con personajes como Don Quijote o Pedro Páramo, para abrir el análisis jurídico al arte y a conceptos críticos surgidos desde América Latina, con Bolívar Echeverría y Aníbal Quijano, entre otros. La creación de un nuevo paradigma de mundo demandará más creación y menos prescripción; más imaginación y menos límites inclusivos. Esto es lo que propone la utopía del oprimido.